Vestigio del franquismo retirado de las calles de Barcelona

estatua franquista

En concreto la estatua franquista de la Victoria, situada en una de las partes más nobles de la Ciudad Condal, a saber, en la intersección entre el paseo de Gràcia y la avenida Diagonal.

Este gozoso hecho ha hecho llorar de emoción a unas doscientas personas, en su mayoría personas mayores, Región urbana de Barcelona5.012.961 habitantes, e incluso un grupo de ellos ha asegurado sentir escalofríos al comprobar que retiraban definitivamente esa gran escultura, la última con simbología franquista que quedaba en Barcelona. Se escucharon además frases tan definitivas como “ya era hora” además de sonoros aplausos y consignas republicanas.

Un hecho tan esperado por la ciudadanía, que vive en una ciudad azotada por el paro y con unas deudas considerables en las arcas de su ayuntamiento, no ha provocado que la Guardia Urbana llegue a cortar el tráfico que rodea a la escultura pero sí ha controlado el paso para facilitar el trabajo ya que ha habido problemas con el desmontaje ya que el enganche no se sujetaba bien.

El  alcalde de Barcelona, Jordi Hereu  ha justificado que la estatua no se haya retirado antes porque “su prioridad era retirar antes los monumentos que representaban «una simbología más clara», Barcelona «es una ciudad puntera en la aplicación de la Ley de Memoria Histórica y ya puede dormir un poco más tranquila ya que la retirada del mármol que  ofendía el espíritu democrático y antidictatorial del los barceloneses ha supuesto un gran momento de normalización democrática, no hay nada que recordar con orgullo de aquella victoria, que fue una gran derrota para la cultura e instituciones catalanas».

PD. La estatua retirada por constituir una flagrante ofensa a la ciudadanía es una figura femenina ataviada con una túnica, obra de Frederic Marès, que enarbola en su mano derecha alzada una rama de laurel y sostiene con la izquierda una pequeña victoria alada, tendrá como destino el Museu d’Història de Barcelona.

He aquí dos comentarios a la medida:

A) “Catalunya sufrió con dureza la dictadura franquista, por lo tanto hubo muchas personas que padecieron la represión, la tortura e incluso la muerte. Por suerte la inmensa mayoría de catalanes, con la llegada de la democracia, hemos querido pasar página y vivir con vistas al futuro. La retirada de la estatua de Frederic Marès me parece un sin sentido; la he contemplado centenares de veces y puedo asegurar que en ningún momento me hizo recordar la dictadura de Franco. Posiblemente a los dos centenares de personas republicanas presentes en el momento de la retirada de la estatua les habrá parecido un éxito la desaparición de una simbología franquista. Pero ahora tenemos unas nuevas generaciones nacidas en la democracia, y para ellos esa simbología franquista es simplemente historia. Como prueba podríamos poner el Monumento a la Batalla del Ebro en Tortosa inaugurado por Franco en 1966; los tortosinos/as, que no vivieron la dictadura, son partidarios de mantener este monumento sobre el río Ebro”

B) ¿No hubiera sido mas barato y mas políticamente correcto cambiarla? Por ejemplo, en vez de levantar el brazo derecho, si levantara el izquierdo con el puño cerrado, algunos políticos hubieran llorado de emoción. Y si en vez de eso hubiera hecho «butifarra» sería sin duda alguna el monumento al alcalde mas popular de Barcelona en toda su historia”

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