Comenzaremos bebiendo el cáliz amargo que nos ha deparado el destino este verano: contemplar al ex presidiario-de momento- Julián Muñoz en calzoncillos blancos en la cubierta de un yate con su nueva novia Karina Pau, luciendo tipo y morreándose en una vertiginosa escena en que se han sumado el vaivén de las olas y sus lúbricos movimientos. ¿Merece esto España? Nos tememos que detrás de todo esto puede estar JJVázquez para después burlarse a modo en Sálvame, aunque la caspa por antonomasia puede ir en aumento ya que Lydia Lozano acaba de anunciar que Julián Muñoz va a aparecer desnudo en una revista, en un barco, y parece que es un posado pactado. Hasta es posible que sea a la manera del conde Lecquio aunque no hay que perder de vista que el tal Julián es ya sexagenario y que difícilmente podría lucir la lozanía del aristócrata italiano por medios naturales.
Ante la estremecedora visión del ex novio de la Pantoja en la cubierta de un yate, de esa forma y con esos alardes, muchas madres que tienen a los hijos en la cárcel por haber encadenado una serie de robos menores han llamado a los medios preguntándo cómo es posible que la Justicia lo permita: un señor que tiene aún más de sesenta cuentas pendientes en los juzgados y que es acusado de haber hecho desaparecer tantos millones de euros del Ayuntamiento de Marbella vive fastuosamente mientras tantos millones de españoles están condenados a ver el mar a través de la escena más hortera del verano.
Dios conserve la vista a los técnicos del Madrid: Dejaron ir, malvendiéndolos, a Sneijder y Robben, dos que valen por once , hasta ahora son dos de las estrellas del Mundial- Sneijder ha sido campeón de Europa hace poco-. No tuvieron bastante con Etoo. Dios les conserve la vista y la cartera ya que todos los veranos se endeudan hasta las cejas.
Y Sara Carbonero: Por encima del fútbol y por el interés que suscita se ha convertido en objetivo prioritario de los fotógrafos en el campeonato: Carbonero, al otro lado de la banda
