Sin prisa pero sin pausa se acerca en Andalucía el 25-M en que previsiblemente se dará la ocasión más alta de los últimos siglos, solo comparable al advenimiento, para bien de la Patria y de la democracia, -y para disgusto del Borbón- de la Pepa, allá por 1812: la llegada al poder de Arenas Bocanegra después de una larga travesía del desierto de 30 años, algo en lo que ha sido precedido por el Mesías Rajoy, que, con poco margen de error, tiene guardada la traca final de las malas noticias hasta después de dicho día.
Una llegada que esperamos los andaluces sea para bien si no se consuma el contubernio entre socialistas y comunistas, que, por misteriosas razones, no se dio en Extremadura. Si llega el citado Arenas Bocanegra finalmente al palacio de San Telmo será por demérito de sus antecesores que se han relajado sobremanera en el asunto de la corrupción, cuya guinda es el caso Ivercaria, sacado sospechosamente en plena campaña electoral pero que la jueza de turno no ha querido admitir porque, teniendo seguramente un fondo de verdad los hechos que se describen, le presentan una cinta manipuladísima en 13 sitios..En este caso la avaricia les ha roto el saco de la ambición.
Qué nos quedará que ver aún de aquí al día 25. Por lo pronto, toda la artillería pesada de la caverna se ha puesto en posición de combate, abriendo fuego Jaime González, jefe de Opinión de Abc y tertuliano gatuno de Intereconomía – si Torcuato Luca de Tena levantara la cabeza– :
“Ni la crisis, ni Arenas ni la juez Alaya pueden hacerle más daño a Griñán que el que el socialismo -gato negro- le ha causado a Andalucía”
Mientras llega el Estado Mayor de los jinetes, sus trompetas y sus claros clarines, he ahí una avanzadilla de Jiménez Losantos, estos dos –escudero y escudera-que afilan sus lenguas en Libertad Digital:
Pablo Molina :
“Pero en realidad no es que los andaluces acaben de descubrir la corrupción sistemática del PSOE. Lo sabían desde el principio, pero mientras ha habido dinero para aliviar escrúpulos, untar conciencias y torcer voluntades el PSOE ha ido encadenando una victoria tras otra. Los socialistas son incapaces de entender cómo funciona la economía en las sociedades libres y los socialistas andaluces, todavía más (…) El PSOE andaluz es culpable de haber envilecido a toda una sociedad anulando sus resortes morales. Con su holding de agencias corruptoras, Griñán ha conseguido erradicar la cultura del esfuerzo, la iniciativa privada y la libertad para implantar la ética del trinque, de tal forma que sus paisanos ya sólo le afean que el dinero que debía llegarles se lo haya quedado el putero de la consejería del ramo (…) El problema es que los socialistas van a dejar a una sociedad en pleno síndrome de abstinencia del trinque y en estos casos suelen ocurrir episodios violentos. Esperemos que los sociatas le hayan dejado a Arenas al menos la metadona presupuestaria suficiente para tratar a tanto enfermo”.
Y Almudena Negro:
“Y además, y esto los tiene en un sin vivir, sin Andalucía en manos del PSOE el Partido Popular tiene casi garantizado gobernar mucho tiempo. Demasiado tiempo para una izquierda que cree que el poder es suyo por derecho propio y que sólo admite la democracia mientras sirve a sus fines. Ese y no otro es el motivo principal por el cual sindicatos verticales, mareas verdes y rojas, indignados del ‘no hay pan para tanto chorizo’, siempre que éste sea del PP, y estudiantes que no estudian anden tomando las calles incluso en fecha tan simbólica como el 11-M. Están desesperados intentando arañar votos. A ver si alguien se va a pensar que lo que estamos viendo estos días atrás es por la calidad de la educación, la calefacción de algún instituto, el copago sanitario, la reforma laboral o la paz en el mundo. De eso nada. Se trata de Andalucía. Para el PSOE, ganar o morir”.
Y lo más preocupante, la descripción del sistema de gobierno que la mayoría de los andaluces han querido para su tierra a cargo de Fray Josepho, que no necesita presentación. El vate horrible ha cogido un diccionario de sinónimos y ha descargado los más purulentos:
“Estiércol, podredumbre, fetideces,
carroña, mugre, vómito, excreciones,
detritos, excrementos, deyecciones,
basuras, pus, boñigas, plastas, heces…
Piltrafas, suciedades, hediondeces,
gangrena, purulencia, corrupciones,
churre, putrefacción, defecaciones,
orín, fermento, asco, putrideces…
Miasmas, peste, tufo de cloaca,
cochambre, roña, moho, pringue, caca,
desechos, inmundicias, porquería…
En suma: treinta años con la izquierda
nos han empantanado tanta mierda
que ya no aguanta más Andalucía”.
(continuará…)
