A pesar de todos los pesares la Memoria Histórica se abre paso

mapa de fosas comunes

Mapa de las fosas comunes

 La Memoria Histórica referida a aquellos que fueron ejecutados `por la  política de tierra quemada de la represión franquista sigue abriéndose paso a duras penas incluso habiendo dejado en el camino a ilustres cadáveres políticos, como el del laureado juez Garzón reconocido internacionalmente pero muy discutido en España donde se encuentra encausado por el Tribunal Supremo a instancias precisamente de fuerzas que coadyuvaron a aquella negra página de nuestra historia o por otros claramente simpatizantes de las mismas.

La Memoria Histórica, tan denostada absurdamente por algunos, se irá llevando a la práctica por lo menos mientras queden testigos directos de lo que ha sido llamado por Paul Preston   el holocausto español, precisamente anterior en el tiempo al que después tuvo lugar en la Alemania nazi y que también ha sido negado por algunos sectores simpatizantes de los horrores.

Lo cierto es que muchos de los 150.000 ejecutados permanecen aún enterrados en fosas comunes a lo largo de toda la geografía española aunque en los últimos 12 meses, a pesar de las cortapisas, las nuevas leyes están favoreciendo las exhumaciones de los cadáveres de ejecutados que devolverán la dignidad no solo a los fusilados sino también a sus familiares.

Lo último investigado está obligando a que los expertos redimensionen la magnitud de la represión franquista, es el caso de la  localización y exhumación que finalizó el pasado julio en Gumiel de Izán, Burgos, donde técnicos, arqueólogos y antropólogos sacaron a la luz más de 50 fusilados de la «Fosa de los Ferroviarios” vinculados a los sindicatos CNT y UGT y trabajadores de la Renfe. En Aranda de Duero las excavaciones de los últimos años han elevado el número de cuerpos recuperados por encima de los 800, mientras que las cifras oficiales los situaban entorno a 700 y los trabajos de recuperación todavía continúan.

En Menasalbas, Toledo, técnicos de la Universidad Autónoma de Barcelona desenterraron 16 cuerpos de represaliados en abril de 1939 que después fueron enterrados de nuevo en una fosa del cementerio municipal por expreso deseo de las familias pero identificados.

La relación puede hacerse interminable, por no citar la gigantesca fosa común del cementerio de San Rafael de Málaga en la que se cree que hay miles de fusilados sin identificar, La Memoria Histórica sigue abriéndose paso en la ciudad de Málaga o el post en que se trata de algunos a los que no les gustan estas inofensivas averiguaciones:  :  Admoniciones contra las conductas erróneas Ellos sabrán por qué.

 

 

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