El 11-M y los cansinos

el 11-M 

Los demócratas de verdad, en teoría, deben acatar las sentencias de los tribunales de justicia –así, en minúsculas, para que sean todos abarcados- aunque vemos que en la práctica no sucede así. Y esto le ocurre  a periodistas y medios de distintos pelajes ideológicos, caso de Losantos o de El Mundo y Libertad Digital: ni un solo día de su atribulada y contradictoria existencia han dejado de hablar del 11-M y de la Sentencia que dictó que en la masacre de los trenes ocurrida el 11 de marzo de 2004 no hubo  ni etarras, ni Titadyne, ni conspiración.

Hoy, en plena canícula y para no variar, los cansinos insisten. Así Ángela Martialay nos cuenta que la titular del Juzgado de Instrucción Número 43 de Madrid, Coro Cillán, continúa tomando declaración a los Tedax que participaron en la recogida y posterior examen de las muestras del 11-M.:  “el artificiero C. M. con número 80.938 ha señalado que fue relevado de sus funciones y sustuido por la mano derecha de Sánchez Manzano, el tedax Fernando Blázquez, tras negarse a alterar su informe pericial sobre las muestras de tornillos que fueron obtenidas de la mochila de Vallecas, de Mina Conchita y del foco de la calle Téllez.”

El tedax -que ha declarado por videoconferencia al encontrarse destinado en Almería- ha subrayado que en el complejo policial de Canillas no se redactó ningún acta con la relación de los restos recopilados tras los atentados, aunque «allí estaba llegando mucho material» y lo habitual hubiera sido hacerlo”

Sobre la citada hasta extenuación mochila vallecana se extiende además  Manuel Marraco, en El Mundo y  cuenta que “ el tedax que manejó el teléfono de la mochila de Vallecas ha refutado e ante la juez la versión ofrecida por el jefe de los artificieros en el 11-M, Juan Jesús Sánchez Manzano, sobre los datos obtenidos de ese Terminal ya que el 12 de marzo llegó a introducir su propia tarjeta Movistar en ese teléfono para poder encenderlo, pero «el teléfono estaba ya sin batería con lo que Manzano nunca pudo llegar a saber a qué hora estaba fijada la alarma del teléfono, porque la fecha, el día y la hora se borran cuando la batería se quita durante unos segundos”

Más detalles: es dudoso que los terroristas  manejaran el teléfono con la tarjeta Amena hallada en su interior porque, según la investigación, el teléfono Movistar había sido liberado, pero esa madrugada del 12 de marzo los policías no consiguieron encenderlo con una tarjeta Vodafone. Sólo con la de Movistar. ¿Cómo pudo entonces funcionar con una Amena, que en la actualidad es Orange?

Pedro J., Losantos, el juez Bermudez, la mochila…algún día debe acabar esta pesadilla que nada puede hacer por las 192 víctimas directas y por los miles de afectados indirectos.

 

 

 

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