Recurrencias (3)

Cerramos de esta manera la nueva incursión en el pasado que no lo es tanto pues repasando la prensa de ayer y oyendo la radio de hoy mismo se vislumbra,no se adivina,se constata que en estos momentos se libra una titánica lucha en la que hay dos bandos muy bien delimitados y que quiere imponer cada uno su modelo político-religioso o laico-político y en que la Monarquía está siendo un poco zarandeada, a la que piden,como si esto fuera posible al existir un Parlamento y un Jefe de Gobierno,que dé un golpe de timón.Incluso da la impresión al profano de que en este alineamiento la Iglesia,la Monarquía,El Gobierno y la Oposición van en naves separadas y con rumbos distintos, asunto malo para la gobernabilidad del país y su estabilidad.Pero esta es una opinión humilde a la que gustosamente renunciaré cuando sea convencido de lo contrario.Dijo el demócrata y valiente general Gutiérrez Mellado que seguríamos hablando de la guerra civil mientras vivieran los nietos de aquellos que cayeron de una forma u otra en aquella guerra o sufrieran sus consecuencias, por eso traigo hoy aquí y para acabar, la noticia de que un señor de aspecto angelical, de comunión diaria, autor de innumerables obras literarias pías y artículos en la tercera de ABC durante muchos años, fue el Presidente de la Comisión Depuradora de Maestro,desde Burgos.Está documentado que fueron combatidos con gran saña por ser considerados unos peligrosos enemigos públicos y sostén de la República, aunque únicamente poseyeran las mortíferas armas de la tiza,el borrador, el amor por la verdad y el conocimiento,la bonhomía y muchas carencias económicas que no del ánimo.En fin, uno de los estamentos a batir y con mayor facilidad: sesenta mil maestros fueron depurados durante un número indeterminado de años y privados de sus derechos y bastantes pasados por las armas. Nos salen en total unas trescientas mil personas más pasando las fatigas del hambre y del desprecio.Seguramente los hijos y nietos de aquellos no comparten las peregrinas teorías de un político, de la saga de los Oreja, en la que don Marcelino sería todo un moderado en comparación con lo que vendría después, teorías que afirman que aquellos tiempos fueron un oasis de paz,casi la Arcadia feliz. 

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