La derrota copera del Barça y la fiesta de Sant Jordi vituperadas por la caverna

copa del rey 2011

sant jordi

Hombre, una buena porción de aficionados al fútbol si que nos hemos alegrado de la victoria del Real Madrid en la copa del Rey de 2011. No es bueno que un equipo, el Barça, a pesar de tener a los tres mejores jugadores del mundo, siga ganándolo todo, como el año pasado, con seis títulos. Este año ya tiene la Liga en el bolsillo y la Champion está por ver. Creo que el Madrid tiene mejor plantilla sin duda y parece que Mou, que no es santo de mi devoción, está consiguiendo crear un equipo.

Es decir, alegría por la victoria del Madrid aunque me hubiera gustado más la del Atlético de Madrid o Sevilla –el  Málaga tiene poca pasta-, pero de eso a compartir los extremismos de Cesar Vidal va un abismo: el  cultísimo y bastante pedante escribe Gracias, Real Madrid”, intentando abrir una inexistente brecha entre las muy nobles y modernas ciudades de Madrid y Barcelona, con estos excesos y cursis majaderías.

: “Es notorio que a mí el fútbol me importa un bledo (…) Recientemente un coronel, antiguo compañero de clase, me comentó que sus recuerdos de infancia me incluían apoyado en una pared del patio del colegio leyendo un libro mientras el resto de los niños se dedicaba a darle patadas a un balón”.

: “En realidad, de lo que yo me alegré fue de la derrota más que merecida del Barça y de la cara que se le puso a ese señor de mandíbula semimussoliniana que se llama Artur Mas y que, al parecer, sólo piensa en cómo vaciarnos los bolsillos a los españoles”.
: “No es que me alegre de la desgracia ajena. Lo que pasa es que he calculado el dinero que nos hemos ahorrado con la victoria del Real Madrid”. Y “Tampoco se dedicará dinero público a informes sobre las razones de la victoria del Barça sobre el centralismo de Madrit”.
: “Ningún nacionalista majadero -difícil encontrar un pleonasmo mejor-…”

Por Libertad digital tenemos al banderillero José García Domínguez que se burla de  la fiesta de Sant Jordi -ya saben, aquella en la que els catalans  blanden las peligrosas armas de una rosa y un libro- de esta infame manera mediante el libelo  “Caganers”:

 “…Más caca. Sant Jordi, circense alarde de miseria intelectual. Los creadores, exhibidos en sus casetas como monos de feria. Acaso a la espera de que algú sn día les lancen un cacahuete. Y mientras, soportando estoicos el verse equiparados a una recua innúmera de intrusos, farsantes y caganers audiovisuales. La muchedumbre, a su vez, arremolinada en torno al último rebuzno de la correspondiente celebridad mediática. O abalanzándose sobre el enésimo manual ful de autoayuda con la misma devoción que sus bisabuelas pagaban al mosén de la parroquia por las bulas de Cuaresma. Y pensar que semejante convite de trileros pasa por admirable muestra de civilidad e ilustración gracias a los publicistas de guardia”.

Creo que ambos son dos separadores de tomo y lomo. Producen más separatistas que las consultas independentistas  de salón con la que se divierten, semana si y semana no, ciertos políticos , desde luego no Durán y Lleida, el más serio y consistente de todos.

 

 

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