En Andalucía acaba de crearse una Dirección General de Memoria Democrática que ignoro si será una hijuela de la estatal Ley de Memoria Histórica. Lo cierto es que su creación pretende el cumplimiento del compromiso del Gobierno andaluz ante el «abandono» del Gobierno de España en estas materias y amplía el concepto de «víctima» , busca la inscripción en los registros civiles de los desaparecidos por el franquismo y la anulación de los juicios «injustos». Habrá una prohibición expresa de exhibición de simbología fascista y de apología de la dictadura franquista. Se regularán los fondos documentales vinculados a la guerra civil o la inclusión del estudio de la memoria histórica en el currículum educativo.
Sin atreverme todavía a hacer un juicio de valor sobre la perentoriedad de esta nueva ley y del hastío que produce el uso abusivo del término «democrático» por algunos, si hay quien lo tiene claro, es el caso de EQM que muestra una vez más su debilidad por los comunistas, por Susana Díaz y «y ni un solo día sin mencionar al arruinador ZP«, diría yo:
» Hoy pensaba escribir sobre otro tema pero al leer una noticia de la que se derivaba la existencia, en la Junta de Andalucía, de una Dirección General de Memoria Democrática [sic], no lo he pensado dos veces y me he puesto a ello.
Si hasta ahora estaba convencido de que Susana Díaz es una rama más del modelo de ‘género’ que el arruinador ZP implantó, basado en ‘preciso una chica una chica joven y más glamur‘ [sic; ‘glamour’ lo convierte en ‘glamur’ El País], ahora es ya no me cabe ninguna duda.
Y no se trata sólo de que esa chica jamás haya trabajado en el mercadoi laboral, tardara la tira de años en acabar la Licenciatura en Derecho o fuera elegida a dedo por el Griñán. Es que permitir al comunista Diego Valderas que cree en su corralito administrativo una Dirección General denominada de la ‘memoria democrática’, no tiene nombre. O sí, vamos.
Sobre todo porque si lo que pretendes, sectariamente, es que se recuerde sólo lo que crees ha sido ocultado por los antidemócratas, lo lógico es que a esa memoria la califiques de tal y no lo contrario. Pero también porque, como ahora veremos, su Director General se hace la picha un lío [expresión andaluza] y cuando asesora a Valderas en cuanto a las funciones que debe de tener tal órgano, no sabe cuando tal memoria es ‘histórica y cuando ‘democrática'»
A las funciones de la Dirección General de Memoria Democrática le hace algunas apostillas:
a) El impulso de la recuperación de la Memoria Histórica y del reconocimiento, individual o colectivo, de las víctimas andaluzas de la Guerra Civil y del franquismo.
[¿’víctimas andaluzas’? querrán decir en Andalucía. ¿Y qué hay de las víctimas de la II República?]
b) Promover la efectividad del derecho de la ciudadanía andaluza al conocimiento de la verdad de los hechos acaecidos durante la Guerra Civil, la dictadura franquista y la transición a la Democracia, así como las circunstancias en que, durantes esos periodos, se produjeron desapariciones de personas y se vulneraron derechos humanos.
[¿’la verdad de los hechos acaecidos durante la transición a la Democracia’?]
c) El impulso del desarrollo de iniciativas que supongan la mayor difusión posible de los principios éticos, culturales y políticos de quienes fueron privados de su vida o libertad personal por su defensa de los valores democráticos.
[¿todavía no se han enterado de que la importancia social del asesinado es su vil asesinato y no sus principios?]»
Etc, etc . El resto en DG de Memoria… Democrática!
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