El Rey, Zapatero, Montilla y el pulpo

forges

la ofrenda a santiago apostol

Ya en pleno verano, con la gente intentando disfrutar al máximo, como si fuera el último de verano de sus vidas, luchando por salir a flote después de la depresión post Mundial de Sudáfrica –ahora se les está haciendo un seguimiento individual a los chicos de la Roja, a ellos y a sus novias, contando los besos que se dan- el mundo de los blogs es un erial en donde las visitas han tocado fondo. Incluso la prensa escrita se resiente y es por ello por lo que recurren a titulares del tipo de «He pasado muy malos ratos y noches sin dormir por la crisis»  . ¿Saben quien padece insomnio?: Zapatero en un gesto de solidaridad con los millones de españoles en paro, con los que les embargan a diario su vivienda.

O este otro El Rey pide al Apóstol ayuda para «resolver cuanto antes la crisis»: Antaño a San Santiago se le pedía, mientras alanceaba sarracenos, que cerrara España. Ahora de nuevo le pide el Rey que nos eche una mano para salir de la crisis, que no permita más burbujas inmobiliarias.

Y aquí Montilla:»Vive en otra galaxia el que crea que el malestar pasará» le hace la competencia a la Pajín con las metáforas cósmicas, siderales, como si no tuviéramos bastante con la confluencia Zapatero-Obama, como si Catalunya fuera el ombligo del mundo.

Traemos, por último, además del humor de Forges, el de Antonio Burgos que en IKEA sí que es una nación desea que cojan el timón de la gobernanza de España Ikea o El Corte Ingles, modelos de efectividad, al mismo tiempo que introduce una curiosa anécdota que no sabemos cómo le habrá sentado al Colectivo de Gays y Lesbianas:

“…Y, lo que es peor, ZP tragando, reformando cuanto haya que reformar para aplicar al Estatuto la Doctrina del Pulpo. No del pulpo Paul del Mundial, sino del cefalópodo del mariquita que cayó al mar y un pulpo le metió el tentáculo por do más pecado había. Y todo el mundo: «¡Matad al pulpo, matad al pulpo!». Y el parguela, en la gloria: «Al pulpo, ni reñirle». El Estatuto va de pulpo del mondrigón.”

 

 

 

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