El día en el que González Pons se explayó

esteban gonzalez pons

Ya ha sido bautizado por Enrique Sopena como el portavoz del centrismo marianista. Ayer nos obsequió con gran cantidad de frases gruesas, de gran calado, que reproducimos para que juzguen si cae en exageraciones o más bien en contradicciones o en desprecios de la memoria de la gente. Todo esto lo utiliza como arma política para ayudar al gran Mariano, superviviente de algunas batallas, aunque creemos que no debe confiarse: la escuadrilla mediática vela sus armas y más ahora que unos de sus paladines regresa con las baterías cargadas, ahora que se le ha renovado la confianza por la cúpula que puede hacerlo.

Así afirma defender los cuidados paliativos no acordándose de la persecución del Dr. Montes o dice que Zapatero quiere asesinar al personal mediante el suicidio asistido. Esteban dijo en la emisora de los mitrados, que  por otra parte continúa la campaña contra su Jefe a las menores de cambio, que  su partido está por la cultura de los cuidados paliativos, por enfrentarse al ensañamiento terapéutico, por querer liquidar al personal con cargo a la Seguridad Social.

Todo esto es una argucia política  encarnada en el doctor Bernat Soria al que se le ha ocurrido activar la eutanasia o el suicidio asistido, de modo que la gente no preste atención al creciente paro, fruto de la crisis económica. Si ustedes prestan atención, todo lo que haga el gobierno de aquí en adelante será una cortina de humo para ocultar la crisis.

Parece haber olvidado don Esteban la persecución que puso en marcha en Madrid  Esperanza Aguirre  con Manuel Lamela de consejero de Sanidad, contra el doctor Montes y sus colaboradores del Severo Ochoa, de Leganés, la que no tiene precedentes en ningún país civilizado. Pero es más: ni con sentencia judicial firme y favorable al doctor Montes, ni Aguirre ni Mariano Rajoy han osado pedir  disculpas ni  por los infundios. Actuaciones estas que niegan que su partido esté por la cultura de los cuidados paliativos, ni don Esteban dijo ni mu cuando era consejero del gobierno valenciano  ante las actitud de sus colegas madrileños.

Todo parece indicar que estamos ante un nuevo caso de aplicación de la ley del embudo y al mismo tiempo de la recuperación de la memoria zaplanesca aplicada a este caso concreto por la pseudo sonrisa del PP.

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