Alipio es ese amigo fiel, el amigo de verdad que todos desearíamos tener, con quien compartir sin miedos ni temores nuestros más íntimos pensamientos. Las Cartas a Alipio son el testimonio de esa «amistad» de José Palacios con su Alipio particular, tejida y desplegada a lo largo numerosas epístolas y que hoy retoma. Con la excusa de discernir el uso correcto de tal o cual término, el autor comparte con nosotros su personal -a menudo descarnada- visión de un mundo que cada vez se nos hace más difícil de entender.