Chulos reales. Lamento español

En este artículo de Raúl del Pozo se describen los cuatro apocalípticos jinetes que en la actualidad asolan España –la Monarquía, Cataluña, crisis y corrupción-  jugando con cierta similitud con el largometraje Cuatro jinetes ,  Four Horsemen, de Ross Ashcroft,  que revela las fallas fundamentales en el sistema económico que ha traído nuestra civilización al borde del desastre:

 “(…) En España, estos corceles podrían resumirse así: Monarquía en declive, Cataluña al borde de la secesión, crisis sin fin y una corrupción que ha dejado las instituciones manchadas. La crisis es el más escuálido y esquelético de los caballos. Joan Rosell se lo ha dicho muy bien a la temible Ana Pastor en El objetivo: «Los dos tercios de las empresas están en pérdidas».

Casi todo lo demás es propaganda, excepto que la recesión ha terminado, pero con un futuro en el que hay que elegir entre minijobs, emigración o paro. El mundo ha cambiado, el modelo es China y la demografía será del hijo y medio, sin viagra para el abuelo.

Los otros trotes hacia el abismo tienen arreglo. Rajoy declara que no aceptará que se juegue con la soberanía, los catalanes no se han acordado del Conde Duque de Olivares. El Conseller de Economía de Mas, ya sin socialistas para el balcón, comenta que si la línea extrema prevalece, si no es en esta generación, será en la siguiente: Cataluña tendrá estado propio.

Junqueras tiene la ilusión de proclamar la república de Cataluña con gramallas, maceros con cachiporras de plata y pubillas de castellers. Pero ya recula y explica que la consulta se hará más pronto o más tarde. Ellos mismos lo irán dejando hasta las calendas griegas y recordarán que proclamaron dos veces la independencia y no hubo nada. Si llegara a ocurrir, más se perdió en Cuba.

De la Monarquía unida a la corrupción, ¿qué? El día 21 de noviembre el Rey volverá al quirófano. Mientras Juan Carlos no tire la granada de gules y las tres flores de lis, no lo moverán y, en el caso de que lo hagan, los Borbones siempre vuelven. Es una ley histórica. En lo tocante a la corrupción unida a la Monarquía, recordemos a los corresponsales del XIX . Decían: «Los contrabandistas y los chulos de las reinas e infantas son la única fuerza que nunca se desorganiza en España».

María Cristina se lió con Fernando Muñoz guardia de corps, tres meses después de la muerte de Fernando VII. La Reina Madre lo hizo duque y marqués, terminaron juntos en el exilio. ¿Y hablan ahora de corrupción en la familia real? A Muñoz, el chulo conquense, le acusaron hasta de vender esclavos””

 

2 comments

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *