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Hay tanto nerviosismo en el PP que ve fantasmas por doquier, y hasta los ha visto en los abatidos astados, como se ven en la foto, y que según Losantos nos ha informado esta mañana son muflones, al mismo tiempo que le daba una pequeña tregua a Rajoy para atacar de lleno a Bermejo y Garzón.
Está tan nervioso Rajoy que hoy se ha reunido solemnemente con el staff del partido, diciendo que se siente víctima de una cacería política él, su partido y los más de diez millones de votantes populares, y por ello va a pedir la recusación de Garzón: todo los latrocinios y espionajes que se están descubriendo e investigando en Madrid ahora resulta que son una pura persecución política y para él nunca una fiscalía del Estado había estado tan mediatizada en la democracia. Ni con Suárez, ni con Felipe, ni con Aznar, o sea, el cuento de nunca acabar: si la justicia va a por nosotros la ponemos bajo sospecha.
La ley del Embudo: hasta el yerno del imputado Fabra , Güemes, saca hoy pecho diciendo: “estamos ante una nueva cacería política del adversario democrático», en clara referencia a la información publicada por un diario sobre la supuesta cena y posterior cacería del Ministro de Defensa, Mariano Fernández Bermejo, y el juez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón.Güemes ha advertido que «intentar aniquilar al adversario» significa que «están en un juego muy peligroso”
Y a escala provincial: El equipo de gobierno del PSOE e IU en la Diputación pidió ayer la dimisión del alcalde de Alhaurín el Grande (Málaga), Juan Martín Serón (PP), durante el transcurso de un Pleno ordinario, en el que el PP defendió la presunción de inocencia del regidor, imputado en el caso de corrupción urbanística Troya. A la sesión acudieron unos 300 vecinos del municipio en el que mostraron su apoyo a Martín Serón y criticaron «la política de acoso y derribo por parte del PSOE e IU contra nuestro alcalde y municipio».
«Es intolerable que un ciudadano cuestione el poder judicial, más aún si es un representante público», criticó el presidente de la Diputación, Salvador Pendón, que señaló que el equipo de gobierno «no cuestiona la presunción de inocencia de Martín Serón, pero reprueba su acusación a la Fiscalía de connivencia con un partido político, algo que es muy grave».
Declaraciones para todos los gustos: la de IU: “no pueden hablar de democracia si mantienen al frente de un cargo público a alguien que está imputado, independientemente de que sea inocente o no». La del portavoz del PP: “han convertido el Pleno en «un tribunal de inquisición en el que Pendón es el inquisidor y Páez el bufón de la corte».
Si en las altas esferas del partido piensan que la actuación de la justicia es una cacería, les ha venido como anillo al dedo la cacería física del muflón como metáfora, no es de extrañar que cunda el ejemplo: es lo que decían algunos vecinos del municipio alhaurino: “Si nosotros estuviéramos imputados como Martín Serón, ahora estaríamos en la cárcel por no poder pagar la fianza…Esa es la justicia que tenemos dependiendo de la “pasta” que tengas”. El citado Martín Serón, el día de su detención ya había dicho, en vez de guardar silencio, que todo aquello estaba orquestado por el PSOE, una pura persecución política.
