Aunque pudiera parecer lo contrario no somos proclives a traer al clero, sea cual sea su confesión, a esta página, pero ustedes dirán si no ponen el mayor empeño en estar de actualidad según nos dicen los periódicos de papel o digitales. Para los que hemos sido criados en los misterios de la religión no es algo deseable, pero ya bien entrado el siglo XXI aún se dan las actitudes medievales de cuando los obispos se ponían al frente de sus mesnadas o ejércitos, e incluso era creencia popular que a veces algún Apóstol, luego Patrón de España, comandaba los ejércitos cristianos contra los sarracenos, para reconquistar el territorio invadido, y siempre se triunfaba, o se recuperaban tierras o se ganaba el cielo.
Un ejemplo moderno de lo que decimos es que el obispo ortodoxo de Kosovo insta a Serbia a reconquistar militarmente el territorio, una guerra civil en toda regla, protestando además porque la autoridad civil serbia apuesta por la vía pacífica para recuperar el territorio recién independizado. El obispo serbio Artemije, de la diócesis ortodoxa de Raska-Prizren , que incluye a Kosovo, ha exigido al Gobierno de Belgrado la declaración de Kosovo como territorio ocupado, adquirir armas a Rusia y reconquistar militarmente el territorio, que ayer declaró unilateralmente su independencia. El obispo calificó de «vergüenza» las declaraciones del jefe del Estado Mayor serbio, general Zdravko Ponos, según las cuales Kosovo no va a ser recuperado por la vía militar. Sin rastro de demagogia por nuestra parte: ¿les parece evangélica tal postura o más en la línea de los fundamentalismos que acechan la paz mundial?
Hasta que no pase más tiempo no se verá la viabilidad de este nuevo Estado sobre el que hemos oído en las últimas horas dos opiniones: el noventa por ciento de la población, de origen albanés lo quiere, y también lo quiere Estados Unidos, ya que Kosovo puede ser una gran base militar en el avispero, que tiene vocación de seguir siéndolo, de los Balcanes.
Al lado de este aguerrido obispo serbio lo de los pastores canarios es pecata minuta en su empeño de considerar a los profesores de religión como catequistas de la religión católica sufragados con el dinero de un Estado aconfesional. La Federación Estatal de Profesores de Religión (Feper) confiesa el desánimo con que vive el desarrollo de la Ley Orgánica de Educación (LOE), un año después de su aplicación. Los obispos siguen despidiendo a docentes de religión sin explicación alguna y el Gobierno no aplica su ley por miedo a la jerarquía o sabedora de la influencia de la misma en la sociedad: más del ochenta por ciento de los padres prefiere que sus hijos reciban la clase de religión católica.
Por último: ni un día sin Gallardón, que da una de cal y otra de arena: ayer diciendo a Raúl, el olvidado de L.Aragonés, lo de la aparición o no en algunas listas y hoy besándose efusivamente con E.Aguirre entre flashes, cámaras y vítores. Hoy ha sido un día feliz para Rajoy que además ya está a un punto de ZP. Se ve que Gallardón está echando el hígado y el estómago de los políticos de raza y dispuesto a tragarse un sapo diario: sigue promocionándose, quizá esperando una oportunidad que se le podría presentar el 10-M, donde también le estaría esperando la otra política de raza, Esperanza.
Bueno, si hay alguien que puede resultar herido por la independencia de Kosovo es precisamente la Iglesia Ortodoxa….el clero de Kosovo se ha visto azotado ya que es el símbolo nacional más evidente de la naturaleza serbia de la zona…monasterios de un valor incalculable fueron arrasados, no solo en 1999, sino en abril de 2004 con los disturbios «causados por la muerte de dos niños albanokosovares en Mitrovika».
Ya por entonces el patriarca de Kosovo se remitía a la resolución de la ONU que regulaba la forma de protectorado de la zona a las Naciones Unidas y en concreto a un artículo que venía a decir que si las tropas de la OTAN desplegadas no lograban garantizar la integridad de los puntos de interés patrimonial (amén de la seguridad y libre movimiento de los serbios), estaria entonces autorizada la entrada de nuevo de la policía y cuerpos militares de Serbia.
El serbio de Kosovo se ve ABSOLUTAMENTE abandonado por el gobierno de Belgrado, el único elemento aglutinador es precisamente el clero…los partidos políticos sólo hacen presencia ante unas elecciones, pagando a un paisano para que reparta algo de propaganda en los bares donde medio ebrios y aburridos matan el tiempo.
Pues claro que van a estar beligerantes!!cuantos curas vociferarían desde un púlpito si el Vaticano estuviera amenazado con ser ocupado por integristas de Hamas, como puede pasar en el monasterio de Pec, cuna de la iglesia ortodoxa serbia…
PD: interesante sería hablar de la presencia de saudíes financiando mezquitas en Kosovo, lo mismo que pasó cuando EEUU pegó el toque a los bosniacos cuando entre sus milicias se inundaron de integristas islámicos…
Fueron, aproximadamente, en toda España, 6.832 los muertos de la persecución religiosa; 4.184 eran sacerdotes del clero secular, incluidos 12 obispos y un administrador apostólico; 2.365 religiosos y 283 religiosas. De ellos, 6.500 en menos de un año.
Los anteriores datos están extraídos de la tesis doctoral del obispo Antonio Montero y que explica para muchos la actitud de la Iglesia española después de la guerra civil de total sumisión a los vencedores. ¿Fue una postura más humana que cristiana? Aquí, en este mundo tan convulso ya no pone la otra mejilla ni Ghandi ni la Madre Teresa de Calcuta. Y menos el arzobispo serbio al que le han hecho menos cosas que a sus colegas españoles y quiere entrar a saco en Pristina, como los mercenarios de Carlos V en Roma y no recuerda aquel pasaje evangélico en que cuando fueron a prender a Jesús los que estaban con él le dijeron: “Señor, ¿heriremos a espada?” Y uno de ellos hirió a un siervo del sumo sacerdote, y le cortó la oreja derecha. Entonces respondiendo Jesús, dijo: “Basta ya; dejad.” Y tocando su oreja, le sanó.
No hemos tenido tiempo de releer su interesante relato sobre la situación en Kosovo y vamos a procurar que los que leen la página lo hagan también con sus esclarecedores comentarios.