Dos Carlos a la baja, Dívar y Dávila

El primero de ellos, Carlos Dávila , de menor importancia que Carlos Dívar, que el jueves 21, según ha anunciado él mismo, dejará de ser la cuarta autoridad del Estado, pero ambos carne de prensa y sobre todo, el segundo carne de cañón por sus continuas apariciones por esos hoteles y restaurantes de Dios .expresión que viene al pelo dado que se trata de un hombre piísimo, en que las tarjetas de que dispone por su alto rango han echado fuego estos últimos años, ya solo, en compañía de su escolta preferido, o de los demás escoltas que su alta condición necesita. Algo que en sus círculos íntimos seguro que se sabía pero que ha visto la luz gracias a la denuncia de un compañero en primer término,  pero que finalmente hoy  ha anunciado el propio Dívar que tomará una decisión “contundente” este jueves, algo que mayoría de los miembros del Poder Judicial han interpretado como que ese día presentará su dimisión Los 14 vocales que han intervenido  han coincidido en calificar la situación de «insostenible, Benítez, el que levantó la liebre, cree que a Dívar «no le queda otra salida» y que si no se va se activarán los mecanismos «para destituirle», Y finalmente 17 jueces decanos han expresado «vergüenza» por la polémica.

El bloguero  Francisco José Fernández de la Cigoña “ un laico de setenta y un años que está encantado con su Iglesia y cabreado con algunos individuos de su Iglesia.”, que lleva los asuntos de Religión en La Gaceta, también ha pillado un cabreo monumental con Dívar:

 “Lo del catolicísimo de Dívar me parece impresentable”. “Su silencio alimenta todas las sospechas. Incluso las personales. Que ya algunos aventuran. Muy poco católicas. Es muy probable que sean un infundio. Pero su silencio les da pábulo. Fue rarísimo que el PSOE zapateril se aviniera a su nombramiento. Hoy hace pensar a algunos que les pareció de maravilla por tenerle como carne de chantaje”. “Iba de católico modelo. Con más rezos, más misas y más comuniones que nadie. Maravilloso si su actuación pública se correspondiera con su vida. En otro caso, un hipócrita de tomo y lomo. Creo que ya es hora de conocer lo que hay. Y si se niega a manifestarlo, como hasta ahora parece el caso, pues a olvidarnos de ese paradigma del catolicismo. Porque de eso, nada. No pasaría de meapilas absolutamente prescindible”  (Algunas aseveraciones del de la Cigoña son dignas de estudio sobre todo lo de la maniobra zapàteril o su pretendida ortodoxia católica)

El que haya sido dado de baja de La Gaceta Carlos Dávila,  su director, entra dentro de las purgas de toda clase –económicas e ideologicas- que se están dando en la prensa española. Conociendo su talante  algunos de han alegrado de su defenestración. Es el cado del catavenenos José Mª Izquierdo:

“Carlos Dávila deja la dirección de La Gaceta. Confiamos en que pronto le veamos publicar en cualquier otro medio del mismo nivel: The New York Times, Le Monde… Aquí esperaremos ansiosos sus bocadillos de chicharrones, aunque vengan envueltos en otro papel. Le sustituye, por ahora, la directora adjunta,Mayte Alfageme. Que tampoco es manca, como aquí han tenido la oportunidad de comprobarlo alguna que otra vez”

Y otros lo han sentido. Es el caso de  Antonio Jiménez, el eficiente vendedor de detectores de radares, y director del programa El Gato al Agua, de Intereconomía, le que lanza un cable, lo que le honra (los demás tertulianos, ni mu)

“Yo quiero desde aquí enviarle un cariñoso saludo a Carlos Dávila y decirle que esta sigue siendo su mesa y que yo le espero en ‘El Gato al Agua’. Por supuesto, sigue siendo su casa. Carlos si no estás viendo, que sepas que nosotros te esperamos en ‘El Gato al Agua”

Sale en su defensa con más argumentos el culto historiador César Vidal que considera su destitución de injusta, por no decir estúpida.
Duda de que se pueda encontrar a alguien con la calidad necesaria para sustituirle:

“La versión del Grupo Intereconomía es que simplemente ha sido una despedida amistosa. Que, efectivamente, reconocen la buena labor que ha realizado durante estos años Carlos Dávila y que no ha pasado nada más. La versión que da El Mundo es que, por el contrario, aquí con lo que nos encontraríamos es casi casi con una caza de brujas, una caza de brujas en la que el integrismo católico una vez más se ha cobrado una pieza.
Y en este caso la pieza era un liberal, que suele ser, por cierto, una de esas piezas que le gusta bastante a cierto sector cobrarse en ciertas ocasiones. No entramos ni salimos en esa cuestión. Pensamos que es una gran pérdida para Intereconomía, pensamos que es una gran pérdida para aquellos que aman la libertad y el buen periodismo y pensamos que, en última instancia, Carlos Dávila muy pronto se habrá reincorporado a este mundo en puestos de la responsabilidad que se merece”

 

One comment

  1. Excelente articulo una muy buena información brindada la verdad es que este tema es muy polemico y nos damos cuenta el descaro de muchos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *