Tras dos días de trabajo, que se reanudarán el lunes, no se han encontrado restos de la joven Marta del Castillo, aunque se ha avanzado mucho en la tarea, pues se está muy cerca de la llamada «zona sensible” del vertedero en la que podría estar el cuerpo de Marta y es por lo que las labores de hoy se han llevado a cabo con más detenimiento, de forma que se han abierto algunas bolsas bajo la supervisión de la policía judicial y científica.
Cuando concluya la primera fase comenzará un trabajo más delicado a cargo de la Policía Judicial y la Policía Científica y que consistirá en depositar los residuos que resulten «sospechosos» para su análisis en una zona limpia, según han señalado a las autoridades los responsables de la empresa.
Los trabajos se desarrollan en un cerro de varias decenas de metros de altura que se ha creado con la basura no orgánica depositada en la zona, que se compacta y luego se cubre con arena procedente de canteras.
La búsqueda de Marta en el vertedero comenzó ayer después de que lo ordenara el juez de instrucción número 4 de Sevilla al cambiar el principal acusado, Miguel C., ex novio de la menor, su versión inicial y decir que habían arrojado el cadáver a un contenedor de basura y no al río Guadalquivir, donde más de 200 agentes la buscaron infructuosamente durante un mes. Se espera que esta sea la versión definitiva aunque si hubiera otra más adelante, le han prometido al padre que allí irían a buscar el cuerpo de su hija: los delincuentes seguirían imponiendo su hoja de ruta criminal.
El vertedero de Alcalá tiene una extensión de unas cien hectáreas, de las que el 30 por ciento se dedican a los vertidos, está rodeado de olivares, de campos de cultivo y fincas en las que se crían caballos.
Y una noticia, también proveniente de Sevilla y que puede generar alarma social, es que agentes de la comisaría de la Policía Nacional del Distrito Triana arrestaron días atrás a nueve chicos, todos ellos menores de edad, a los que se acusa de amenazar, agredir y vejar reiteradamente a un alumno de un colegio cercano: le propinaban palizas al salir del colegio y le exigían entre 50 y 200 euros cada vez, pero al final seguían amenazándolo y atacándolo. Los presuntos agresores, que ya están en libertad con cargos, grabaron los golpes y los colgaron en Internet.
Al parecer, los detenidos exigían al chaval dinero para no ensañarse con él a la salida de las clases diarias, un chantaje económico por el que la víctima llegó a entregar hasta 1.500 euros en varios pagos para así evitar las palizas y los insultos.
Los padres deberían vigilar más a sus hijos menores de edad, supervisar las compañías, las malas, para evitar que a sus hijos, vía método mafioso, le saquen 1500 euros, o se comporten a tan temprana edad como delincuentes consumados, caso de Marta del Castillo, o controlar, en lo posible, las amistades peligrosas de nuestros hijos,-as, caso Marta de Castillo.
La sociedad en general, los padres y el sistema educativo, deben hacer profundas reflexiones para evitar, en lo posible, hechos tan dolorosos que conmueven a la sociedad en sus cimientos. Hay que hacer algo.
