Hay cierta prensa que parece que disfruta dándonos a los españoles malas noticias, como si desearan o se alegraran de que las cosas fuesen mal y así aprendiésemos para las próximas elecciones a votar mejor. Y como hay que recogerlo todo, por si acaso después se cumplen esos negros vaticinios, acerca de que los males de nuestra economía se están agravando, pues se lo mostramos, aunque a continuación Zapatero hace que nos entre el cuerpo en caja y nos dice que son falsos rumores en una especie de muerte al mensajero que no nos conviene. Únicamente tenemos que desearle a ZP más acierto que en la vez anterior cuando negó tantas veces la crisis económica, palabra que hubo que sacársela con fórceps.
Estos son los datos: La agencia de calificación Standard & Poor’s (S&P) ha situado el rating(calificación) a largo plazo del Reino de España, actualmente situado en AAA (el máximo), bajo vigilancia con implicación negativa por los considerables desafíos a los que se enfrenta la economía del país.
España se convierte así en el tercer país de la zona euro que ha recibido la advertencia crediticia de S&P, tras el toque de atención a la deuda pública de Irlanda y Grecia, enfrentándose a un doloroso reajuste de su economía y a un marcado deterioro de sus finanzas públicas. Y lo que dice S&P, al parecer va a misa, y ya ha repercutido en que en el mercado de bonos se haya ampliado el diferencial de España con Alemania y que el mercado de credit default swaps (CDS) de la deuda española que permite a los inversores cubrirse de los impagos de todo tipo de deuda (pública y privada), haya subido desde los 85 puntos de principios de año hasta los 106,5 puntos básicos.
También Reuters advierten que España e Irlanda han sido golpeados muy duramente por el colapso del mercado inmobiliario, contribuyendo al creciente desempleo y la disminución de los ingresos del Gobierno.
No obstante Zapatero, ha dicho que no hay razones para rebajar la calificación de ‘AAA’ de España porque nuestro país goza de fortaleza y solvencia en sus cuentas públicas. Además ha advertido a Standard & Poor’s (S&P), que el propio papel de las agencias de calificación está siendo sometido a debate en la reforma del sistema financiero internacional, en las reuniones del G0 en las que ha participado España. Para más INRI de las tres agencias de calificación reconocidas internacionalmente únicamente Standard &Poors ha puesto en cuestión el rating de la deuda española.
Dicho lo cual suponemos que el impacto de la primera notica habrá quedado neutralizado y todos los cuerpos habrán quedado encajados.
